
El Consejo Federal de Entidades Médicas Colegiadas (CONFEMECO), que agrupa a los colegios y consejos médicos de todo el país, emitió un comunicado en el que expresa su enfático rechazo a la utilización de la teleconsulta como reemplazo del acto médico presencial.
Desde la entidad se advierte que la práctica médica no puede reducirse a un trámite virtual ni tratarse como un servicio de consumo masivo. Se remarca que el encuentro cara a cara entre médico y paciente es insustituible para garantizar una atención de calidad, ética y con sentido humano.
El comunicado también alerta sobre los intereses económicos que impulsan esta modalidad: grandes corporaciones tecnológicas y financieras promueven la teleconsulta con el objetivo de reducir costos, aún a costa de degradar la calidad del servicio, precarizar el ejercicio profesional y mercantilizar la salud.
Si bien CONFEMECO reconoce que la teleconsulta puede ser una herramienta complementaria válida —especialmente en seguimientos o interconsultas—, rechaza su imposición como modelo principal de atención sanitaria. Entre los riesgos que implica, se destacan: la posibilidad de errores diagnósticos (debido a la falta de examen físico), el debilitamiento del vínculo humano, la banalización de la relación médico-paciente y la ausencia de garantías sobre la habilitación profesional de quienes brindan atención a través de una pantalla.
Finalmente, la entidad hace un llamado a las autoridades nacionales y provinciales, a los legisladores y a la sociedad en su conjunto a proteger y defender el acto médico presencial como un bien ético, social y profesional, esencial para resguardar la salud de todos los argentinos.